Entradas

Mostrando las entradas de agosto, 2009

Viaje a mí

- Son 150 pesos- dijo el señor con voz grave y mirándome fijamente. - ¿Cómo? ¿150? ¡Pero esto es un robo! - Bueno, si usted no quiere abonar la multa por mal estacionamiento, consígase un buen abogado y hágale un juicio al gobierno de la municipalidad- continuó el hombre con voz tranquila y con una sonrisa en su rostro. No me gustó nada lo que me dijo el intimidante señor que controlaba el pago de las infracciones notificadas. Yo no estaba de acuerdo, pero no sabía qué argumentos me podían ayudar a defenderme, así que finalmente tuve que pagar la exagerada multa de tránsito. Ahí me di cuenta de que algo no andaba bien en mí. ¿Habré perdido mi capacidad, a lo largo de los años, para mantener una discusión? Cuando yo era tan solo un niño, podía discutir durante largos ratos y sosteniendo siempre cierta lógica. Esto pasaba sobre todo en las comidas familiares por cumpleaños o festividades de otro tipo y nunca con alguien de mi edad; yo discutía con mi tía, 39 años mayor que yo, mientra